El rol de la apoptosis en la carcinogénesis y la respuesta a las drogas antitumorales

 Resumen y comentarios de la conferencia del Dr. Scott H. Kaufmann
(Mayo Clinic, Rochester, MN, USA)

En el Primer Simposio sobre Nuevos Blancos en la Terapia del Cáncer, Buenos Aires, Octubre 5-6, 2000

 

Nota: El Dr. Scott Kaufmann es un experto internacionalmente reconocido en el área de apoptosis y en diversos temas de biología molecular aplicados a la terapia antitumoral.

La apoptosis, una forma de muerte celular, morfológica y bioquímicamente distintiva, ha sido demostrada en células malignas luego de tratamiento con agentes quimioterápicos in vitro, y en tumores sólidos o leucemias tratados con citotóxicos in vivo. En los últimos cinco años, ha sido caracterizada la maquinaria bioquímica fundamental, responsable del proceso apoptótico. Los resultados de este análisis no sólo han identificado factores adicionales que pueden influir la sensibilidad de la célula tumoral a drogas citotóxicas, sino que han provisto nueva evidencia para apoyar la hipótesis que la regulación alterada de las vías de apoptosis juega un rol importante, en primer lugar, en el desarrollo del cáncer.

1.  La maquinaria apoptótica fundamental. Caspasas.

La mayor parte de los cambios morfológicos y bioquímicos observados en las células apoptóticas pueden ser rastreados hasta hallar un evento común: la activación de una familia de proteasas intracelulares, llamadas caspasas. Estas enzimas – sulfhidril-proteasas dirigidas a sitios aspartato – son sintetizadas como proenzimas (zimógenos, llamados procaspasas) y posteriormente activadas por clivaje hidrolítico. Según un modelo actual, hay dos vías principales de caspasas:

  • Una de ellas comienza con la unión de un ligando extracelular a uno de losreceptores celulares de muerte” [por ej.,  Fas/CD95 o bien el receptor a del Factor de Necrosis Tumoral, TNF].

En el ejemplo mejor estudiado, la unión del ligando Fas al receptor Fas provoca el reclutamiento de la molécula adaptadora FADD (sigla correspondiente a : Fas Death Domain, o “dominio de muerte celular ligado a Fas”) al dominio citoplásmico del receptor, seguido de la ligadura de la procaspasa-8 al FADD.

  • La otra vía comienza con la liberación de citocromo c y otras proteínas de la mitocondria.

Una vez liberado, el citocromo c se liga a la proteína Apaf-1 (factor activador de proteasa-1), causando un cambio conformacional ATP-dependendiente que permite que Apaf-1 active la procaspasa-9

Una vez activadas, tanto la caspasa-8 como la  caspasa-9 pueden activar a las caspasas efectoras, “aguas abajo” en la cascada ( caspasas-3, -6 and –7).                       

2.  Regulación de la activación de caspasas.

      La activación de caspasas es un proceso estrictamente regulado.

  •  La vía del receptor de muerte celular es modulada por moléculas que regulan la oligomerización del receptor (un paso necesario para la ligadura del FADD) y por c-FLIP, una molécula que inhibe el reclutamiento y activación de la procaspasa-8.

  • La activación de la vía mitocondrial es modulada por los miembros de la familia antiapoptótica Bcl-2, proteínas de la membrana mitocondrial externa que inhiben la liberación de citocromo c.

La activación de caspasas parece ser regulado también por IAPs [proteínas inhibidoras de apoptosis], las cuales se ligan selectivamente a (e inhiben) las caspasas y sus precursores. Es interesante mencionar que la expresión de dos  IAPs, cIAP1 y cIAP2, está regulada por NFkB, un factor de transcripción implicado en las señales anti-apoptóticas. 

Se han identificado vías bioquímicas adicionales de modulación de la activación de caspasas. Por ejemplo, las señales de las tirosina-quinasas acopladas a receptores en la superficie celular, a través de ras activan a la quinasa lipídica fosfatidil-inositlo-3-quinasa (PI3k), la cual fosforila los lípidos de membrana que contienen inositol. Un producto de esta reacción, el fosfatidil-inositol-3,4-difosfato, activa las proteín-quinasas lípido-dependientes, “aguas arriba” de la proteín quinasa Akt/PKB.  La Akt activada, a su vez inhibe la apoptosis al inhibir la liberación de citocromo c de la mitocondria, en parte por fosforilación del BAD, homólogo proapoptótico de Bcl-2.

 

3.  Disregulación de las vías apoptóticas durante la carcinogénesis.

         Estudios recientes han demostrado que las vías apoptóticas son extensamente atacadas durante la carcinogénesis.

Las vías del receptor de muerte celular son reguladas “en menos”, debido a diversos mecanismos:

  • Sobre-expresión de falsos receptores (“receptores señuelo”) que se unen a los ligandos de muerte celular pero que no generan una señal.

  • Expresión de homólogos de la proteína viral FLIP que evitan el reclutamiento de caspasa-8 por FADD, o bien

  • Menor expresión de procaspasa-8.

La vía mitocondrial es regulada “en menos” mediante:

  • Sobre-expresión de homólogos anti-apoptóticos de Bcl-2.

  • Inactivación – por mutación – de Apaf-1,

  • Regulación “en más” de la vía de PI3k debido a amplificación del gen de PI3k (mayor producción de PI-3,4-difosfato) o inactivación del gen de PTEN (menor degradación del difosfato)

También se ha sugerido que el incremento de actividad de NFkB o la mayor expresión de IAP podría contribuir a la carcinogénesis, atacando ambas vías de caspasas. La reciente demostración que cIAP2 está involucrada en las translocaciones cromosómicas observadas en linfomas extranodales es consistente con esta posibilidad.

4.    Activación de las vías apoptóticas por la quimioterapia antineoplásicas.

Los estudios morfológicos y bioquímicos demuestran que la mayor parte de los agentes antineoplásicos utilizados inducen apoptosis en tipos celulares susceptibles. Los experimentos en que se investigó el mecanismo de activación de caspasas por agentes quimioterápicos han resultado inesperadamente controvertidos. Experimentos iniciales sugirieron que varios agentes antineoplásicos, incluyendo doxorubicina, etopósido, metotrexato y cisplatino, inducen la síntesis del ligando Fas, que a su vez gatilla apoptosis en una forma independiente de la célula. Sin embargo, estudios posteriores han demostrado que la mayor parte de los quimioterápicos fácilmente matan las células a las que falta una vía funcional de Fas o procaspasa-8. En cambio, la deleción del gen de caspasa-9 o de Apaf-1 resulta en la disminución o retraso en la apoptosis inducida por estos agentes.

Como resultado, los modelos actuales sugieren que la mayoría de los agentes antineoplásicos, incluyendo los venenos de topoisomerasa, los agentes que dañan el ADN, y los venenos del huso mitótico, inducen apoptosis causando liberación mitocondrial de citocromo c. El mecanismo no ha sido elucidado.

Sorprendentemente, las fluoropirimidinas inducen apoptosis dependiente de p53 en células de cáncer de colon, induciendo el ligando Fas.

Debido a las diferencias en las dos vías de activación de caspasas, estos resultados tienen potenciales implicancias para la comprensión de los mecanismos de resistencia a diversos agentes antineoplásicos.