GENOMA HUMANO: UN MOMENTO HISTÓRICO
IMPLICANCIAS PARA EL TRATAMIENTO DEL CÁNCER

Pedro M. Politi
Oncólogo clínico, Equipo Interdisciplinario de Oncologia

        Completar la secuencia del genoma humano (si bien faltan algunos retoques) es un logro científico extraordinario. Y nos ha tocado verlo. A mediados de este mes, dos grupos han comunicado separadamente sus resultados: el consorcio internacional de instituciones públicas de investigación, coordinado por el Dr. Francis Collins, de los Institutos Nacionales de la Salud (NIH), y el emprendimiento privado de la empresa Celera Genomics, de EEUU, dirigida por el Dr. Craig Venter. El proyecto público se había iniciado unos 10 años atrás, en tanto que el privado, que inició su tarea mucho más tarde, llegó simultáneamente a la meta, en base a la innovación técnica y a la creatividad de su director. Como reflejo de la competición entre ambos grupos, el consorcio publicó sus resultados en la revista Nature, y el equipo privado lo hizo en Science - ambas, entre las más prestigiosas en ciencias de la vida.

        Como se indica en un editorial en Science, este logro es un comienzo. Señala el inicio de un nuevo enfoque de la Biología como ciencia. Es cierto que el camino que llevó a este punto en la historia va encaramado sobre descubrimientos, ideas y trabajos de muchos investigadores, digamos, desde Mendel a esta parte. Algunos han llamado a esta secuencia una nueva "piedra de Rosetta", o un "Libro de la Vida". Quizás… Pero examinemos con cuidado.

        Ambas secuencias publicadas requieren algún refinamiento. Sin embargo, hasta el momento - y aún siendo cautos en la interpretación - hay revelaciones sorprendentes:

Implicancias para el tratamiento del cáncer

        No hace falta un científico iluminado para visualizar las amplísimas perspectivas que abre este doble descubrimiento: la identificación de la secuencia de genes clave en el control del ciclo celular, apoptosis, migración y metástasis, neo-angiogénesis, etc, debería brindar miles - literalmente - de nuevos blancos terapéuticos. Y como los enfoques podrían centrarse en el gen, en el ARN, o en las proteínas, este número se multiplica rápidamente.

        La expectativa es elevada: lograr terapias altamente selectivas; individualizadas (o individualizables), si fuese posible. No más "bombardeos no selectivos", sino "balas inteligentes". Sí, hemos escuchado este tipo de canciones anteriormente, y seguimos aquí, esperando. Pero nunca antes se había desplegado este escenario ante la humanidad.

        Estará disponible? Estará disponible en el tiempo que nos queda por vivir? Cuando esté disponible… estará de veras disponible (es decir, será economicamente accesible)? El mejor tratamiento no sirve para nada si nunca llega, si no logra ser administrado…

        Abramos otro capítulo: el diagnóstico de probabilidad (riesgo) de contraer cáncer. Supongamos que en un cierto tiempo dispusiéramos de una herramienta tecnológica con razonable precisión para distinguir de entre la población, a quienes tienen un riesgo muy elevado, o moderadamente elevado, de cierto tipo de cáncer. Actualmente, hay herramientas relativamente toscas (por ej. la determinación de los genes BRCA-1 y 2). Aún alcanzando una cuasi-perfección, tendríamos problemas: confidencialidad de la información, posibilidad de uso de esa información con fines de discriminación laboral, o para negar cobertura de salud, u otros fines perversos. Y siempre, siempre el tema de la no-infalibilidad de los resultados, y - no menos importante - que el riesgo de cáncer de la población sin marcadores genéticos no es cero, absolutamente.

        Será el uso inteligente de las nuevas herramientas, lo que nos hará progresar auténticamente… o no.

        La carrera por los nuevos tratamientos comenzó hace tiempo. Ahora, solo se puso más interesante… Pero no sólo hay que "correr" en los laboratorios e instituciones de investigación. Hay que pensar cómo hacer que lo bueno esté al alcance de quienes lo necesitan. Hay que pensar…

Buenos Aires, febrero de 2001.


Referencias bibliográficas

  1. J.C. Venter, et al. The sequence of the human genome. Science 2001; 291: 1304.
  2. International Human Genome Sequencing Consortium. Nature 2001; 409: 860.
  3. B.R. Jasny, D. Kennedy. The human genome (editorial). Science 2001; 291: 1153.