¿CONVOCATORIA A UN ESTADO DE ASAMBLEA O GERENCIAMIENTO DE LA CRISIS?

Escribe: Diana Braceras
Ilustra: Guillermo Poggioli

"Eliminando el juego, eliminando el teatro, yo estaba sin duda en la verdad.
Pero, la verdad, querido amigo, es abrumadora."

Albert Camus, en La caída



        La saludable acogida del "Manifiesto" produjo efectos diversos; como sabemos, la salud no excluye el malestar, consiste en la capacidad de respuesta para poder resolver la situación enfermante o el conflicto.

        En primer lugar, es auspicioso que tal documento, elaborado colectivamente por el Equipo Interdisciplinario de Oncologia, no fue tomado livianamente como un ejercicio catártico de un sector aislado de la comunidad médica; lo cual lo hubiera inutilizado como analizador de la práctica oncológica.
        El efecto de las intervenciones se pone en evidencia por lo que motorizan, es decir por lo que sigue a continuación de ese punto nodal localizado en el diagnóstico. Sino, lo que se manifiesta, se reduce a una descripción situacional, una mostración parcial de un punto de vista particular con el cual se puede coincidir o no. Que no es poco pero, en ciertos momentos lo insuficiente puede ser mortal, como bien lo saben los oncólogos.
        Analizaremos dos tipos de 'tratamientos' posibles surgidos a partir de la gravedad de la situación señalada en el Manifiesto. Ambos implican interpretaciones distintas del conflicto, pero fundamentalmente, la composición misma del problema y de la solución son diferentes. Digamos, la prescripción de la propuesta terapéutica delata que:

  1. Se trata de una próstata senil para unos, cuyos efectos son controlables paliativamente y cambiando algunos malos hábitos se lograría un pasar más llevadero; siempre y cuando se sigan las indicaciones y se respeten los controles de los que saben cómo prolongar el estado del enfermo, en un nivel más o menos aceptable para él y para la familia. El mejoramiento de lo que hay, su "optimización", eficiencia y competitividad, serán los objetivos fundamentales.

  2. Se trata de una enfermedad sistémica. La posibilidad de muerte o de lenta agonía, están en el horizonte. La exigencia incluye la exactitud del diagnóstico tanto como la diversificación de estrategias según un riguroso mapeo del estado y posibilidades de funcionamiento de cada órgano específico como la capacidad de reversibilidad general del curso. Es imperiosa la necesidad de un cambio fundamental, las propuestas deben ser radicales e involucra todo el espectro de la vida del paciente: su constitución orgánica, como las relaciones con el campo social y económico. Se apuesta a la creación de otra cosa, distinta de la que hay, a poner en cuestión y reformular las bases mismas de la existencia. Parafraseando a Camus: Siempre hay razones para matar, en cambio a veces resulta imposible justificar la vida.
        Veamos estas diferentes concepciones, en nuestro contexto profesional qué tipo de propuestas producen( por los frutos...).


PROPUESTA ADMINISTRATIVA O ASAMBLEA PLENARIA

  1. A partir de la adjudicación de la responsabilidad de la crisis a una superestructura inadecuada, una conducción desgastada, y al déficit de participación societaria, la propuesta fundamental es un cambio de personas en la cúpula organizativa y la elaboración de un programa aproximativo a las demandas insatisfechas del conjunto; según la interpretación del grupo que pretende ocupar el lugar de aquellos que antes "se equivocaron".
            En este contexto, la convocatoria a una asamblea, es un instrumento para legitimar una propuesta ya confeccionada por los que "saben" cómo y qué es lo que se debe hacer para bien de todos.
            Los supuestos de esta posición son varios:



  2. Se parte de una crítica radical del campo de la práctica donde se ha detectado la necesidad de cambio. Un objetivo básico es lograr entender las condiciones que sostienen tanto la situación que se quiere cambiar como aquella que aparece como posibilidad de superación del conflicto.
            En este contexto, una asamblea se convoca como el mecanismo idóneo para la producción de ideas, el debate de aspectos de la práctica o de procedimientos que tienden a reproducir y mantener los obstáculos que se desean eliminar, para transformar la crisis en posibilidad de cambio.

            Ninguna posición se construye sin supuestos. Los de este tipo de propuesta son:



ELEGIMOS LA CONVOCATORIA A UN ESTADO DE ASAMBLEA Y NO ADHERIMOS A LA CONFECCIÓN DE LISTAS NI MANDATOS

Porque:




Diana Braceras, 20 de noviembre de 2001.